Churchill War Rooms (I)

Para los ingleses que vivieron el período 1940-41 , el sonido de una sirena debía ser lo más parecido al aliento de la Muerte acercándose y ondeando la guadaña sobre su tétrica figura. Fueron los años en que Hitler ordenó a la Luftwaffe vomitar toneladas de bombas sobre varias ciudades del país pero con atención especial a Londres , con la intención de que semejante presión llevase a Inglaterra a salir de la guerra o a quedar inerte ante la consiguiente invasión. Pero, pese a causar veintitrés mil víctimas y destruir un millón de viviendas, la ciudad aguantó estoicamente tanto esos raids aéreos como los lanzamientos posteriores, desde 1944, de los proyectiles V1 y V2 . Los londinenses utilizaron el Metro como refugio antiaéreo Uno de los sitios emblemáticos de la historia de la capital británica -y, por ende, de todo Reino Unido- se encuentra muy cerca del número 10º de Downing Street, en la parte trasera de la manzana donde tiene su residencia oficial el primer minis...